Una señora cercana a la cuarentena que se agarra con uñas y dientes a la treintena, consciente de que hace un poco el ridículo con ello. Una señora que viene de haber trabajado en gestión cultural doce años, que ha estado detrás de muchas bambalinas, en agencias de artistas, en gabinetes de prensa. Que también anduvo trabajando con artistas plásticos, en museos, en festivales… que ha sido profesora de lengua y literatura, aunque lo suyo era la filosofía, que ha emigrado, que ha vuelto, que ha parido, que está criando a una niña, que tiene perros, que vive en un pueblo y que quiere escribir porque es lo único que nunca jamás ha dejado de hacer.
Una señora que habla sobre temas diferentes, que a veces son cosas estupendas, pero que también dice muchas gilipolleces.
Soy una señora que está intentando vivir de lo que es. A ver qué tal. Léeme , o contrátame. O no. Pero sería bonito.